POR.- LA REDACCIÓN
En pleno jolgorio decembrino, los ciudadanos y las ciudadanas mexicanos supieron entre brindis y brindis del incremento de ocho centavos a la gasolina tipo Magna y 4 centavos a la gasolina tipo Premium y de la espiral inflacionaria resultante en todos los renglones económicos, incluidos los de las importaciones y las exportaciones.
En el reparto de la piñata, también están contemplados corregir los precios del servicio de luz en 6%, y del gas LP en 5%, a lo largo del año. Sin contar la entrada en vigor del 16 % de Impuesto sobre el Valor Agregado, y el 30% de Impuesto Sobre la Renta, que tan a bien tuvieron los congresistas patriotas aprobar de golpe y porrazo.
Considerando que el incremento al salario mínimo para la Zona A, que incluye al Distrito Federal, fue menor al 5%, ya con las cifras asentadas podrá calcularse el impacto negativo que tendrán las alzas en los bolsillos de las familias.
Asumiendo que el Banco de México está en las garras nefandas de Agustín Cartens Cartens, ex Secretario de Hacienda, y ahora dueño de los dineros del país, las expectativas son de gris a negro intenso. No obstante, la institución se avienta la puntada de calcular un crecimiento anual de la economía de 3.1% y una inflación de 5.04%.
Anotemos esta lista de deseos oficial y el costo actual del kilo de tortillas en nueve pesos para ubicar por cuáles caminos irán estas realidades divorciadas.
Con respecto a la Ciudad de México, algunos trámites y servicios se encarecerán. Pero qué tal estuvo el recital de Placido Domingo en el Paseo de la Reforma y la presentación “gratuita” de Emmanuel.
El Impuesto sobre Nóminas es de 2.5%. Una nueva acta de nacimiento por reasignación sexo-genérica: 168 pesos. Una acta de divorcio: 167 pesos. El refrendo anual de placas: 291 pesos. Actas de defunción fuera del Distrito Federal y en el extranjero: 167 pesos. Reposición o Renovación de la Tarjeta de Circulación: 220 pesos. Trámite de baja de vehículo: 300 pesos. Licencia para conducir tipo “A”: 580 pesos. Licencia para conducir tipo “B”, para dos años: 722 pesos, y para tres años 1,085 pesos. Licencia para conducir tipo “C”, para dos años 1,045 pesos, y para tres años 1,570 pesos.
Y como cereza de pastel amargo: el encarecimiento de la tenencia vehicular en 5.6%.
Nada mal para despertar con cruda y gozar del recalentado de la última cena. En las próximas semanas entenderemos cabalmente por qué en México, las fiestas siempre terminan en tragedia.
Así comenzaron los años 1810 y 1910, en aparente calma, y ya sabemos cómo terminaron.
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