jueves, 30 de octubre de 2008

EL SONIDO DE LOS DODOS: Lost in love

"Lost in love" fue uno de los éxitos en la década de 1980 del grupo Air Supply. A continuación le dejamos la letra para que la disfruten, sufran o canten a coro.

I realize the best part of love is the thinnest slice
And it don't count for much
but I'm not letting goI believe there's still much to believe in
So lift your eyes if you feel you can

Reach for a star and I'll show you a planI figured it out
What I needed was someone to show me
You know you can't fool me
I've been loving you too long

It started so easy
You want to carry on

Chorus:
Lost In Love and I don't know much
Was I thinking aloud
Fell out of touch
But I'm back on my feet
Eager to be what you wanted

So lift your eyes if you feel you can
Reach for a star and I'll show you a plan
I figured it out
What I needed was someone to show me

You know you can't fool me
I've been loving you too long
It started so easy
You want to carry on

Chorus
You know you can't fool me
I've been loving you too long
It started so easy
You want to carry on

Chorus
Now I'm lost, lost in love, lost in love, lost in love
Now I'm lost, lost in love, lost in love, lost in love

Lost in love, lost in love, lost in love
Lost in love, lost in love, lost in love.

EDITORIAL: Por una canción

La canción de esta semana es uno de los ejemplos representativos de la cursilería ochentera, sin embargo, sin el más mínimo asomo de vergüenza la elegimos porque es un recordatorio de un dodo de hueso colorado al que nuestro corazón sigue unido.
Let's do the dodo
El último de los dodos

PD: La cursilería siempre siempre se perdona porque es síntoma de amor y éste nunca debe ser condenable.

FARFADET: Saludos desde el Más acá

POR: Marcia Trejo

Si el ciberespacio no está en ningún lado tangible, es probable que por él puedan transitar aquellos que se nos adelantaron a ese paseo infinito que es la muerte y –si tenemos suerte- se enteren de lo que pasa por estos lares leyendo los bytes vestidos de palabras. Por si acaso, por si escuchan o porque sí, el caso es que quisiera dar las gracias póstumas por algunas valiosas lecciones que recibí, las cuales si no fueron debidamente aprendidas no fue por las limitaciones de mis maestros, sino por la insuficiente comprensión de la alumna.

Me gustaría agradecer a Enrique padre por haberme inculcado el espíritu de lucha y la convicción de que –por más difíciles que sean las circunstancias- pueden ser enfrentadas, que lo adverso no es eterno y que hay que ser humildes y saber pedir ayuda cuando se requiere; también por enseñarme el infinito y divertido placer del análisis. Le agradezco los abrazos, las carcajadas, las pláticas nocturnas con helado y música.

A Enrique le doy las gracias por haber compartido 28 años , por su fe amalgamada de incredulidad, por la sensibilidad con toques de cursilería, por el don de curar, por su intensidad, por su inteligencia y su ternura.

A la tía María Esther por enseñar –a través del ejemplo- que la dignidad es capaz de sostener a las personas durante años. A Ana por su enorme generosidad y cumplir con aquello para lo que fue diseñada: amar a raudales. A la tía Alicia que por no ser madre de uno, se convirtió en la mamá ideal de todos los sobrinos.

A Tata, Soraya y Scott por demostrarme que el amor del bueno normalmente viene empaquetado en criaturas cuadrúpedas, peludas y de nariz fría.

Por todo eso y más, gracias y también por convertir la muerte –cuando llegue- en una circunstancia gozosa por la certeza que estarán ahí para continuar nuestras pláticas interrumpidas. Un abrazo con todo mi amor y hasta siempre.

BIBLIONAUTAS: Posada


POR: Marcia Trejo y Raúl Gómez


POSADA. AGUSTÍN SÁNCHEZ GONZÁLEZ. MARTÍNEZ ROCA. Casi desconocido en su tiempo y celebrado décadas después por motivos demagógicos más que artísticos, don José Guadalupe Posada es una figura insólita del México decimonónico tardío a caballo con el de la Revolución y el Nacionalismo institucional. Grabador dotado de una sensibilidad extraordinaria para extraer el alma de la gente, Posada es el equivalente iconográfico de José Alfredo Jiménez en la música tradicional popular mexicana; es el padre de los dibujos que dieron un rostro nítido al mexicano y será por siempre una referencia obligada en la construcción de nuestros conceptos de identidad. No obstante, el mito de Posada no ha dejado estudiar el mitote que fue la vida de don Lupe, hombre de trago fuerte y, según consta en las crónicas, adicto a la mariguana y los cruces aterradores de estas sustancias enloquecedoras. Por ello es plausible la investigación de Agustín Sánchez González que se impuso contarnos la vida de Posada en una contexto de realidad y no de estampita de escuela religiosa. Aunque limitada por el espacio y la complejidad del sujeto de estudio, la biografía escrita por este especialista de la caricatura mexicana es un documento que devuelve el perfil humano de don Guadalupe, opuesto a la unción clasista del poder y sus aduladores. Un libro que simplemente se disfruta y sorprende.

lunes, 27 de octubre de 2008

FARFADET: UNA CRÓNICA DE MUERTOS

UNA LECTURA DE LA MUERTE URBANA

Por: RAÚL GÓMEZ MIGUEL Y JOSÉ SALVADOR OROZCO FARÍAS



La aparición de la primera cruz sorprendió a la gente. La tercera, espantó. La quinta, enojó. La séptima, resignó. La décima, nada.

Las cruces poblaron la ciudad, igual que una jauría de perros, sólo que en esta ocasión, los invasores quedaban quietos, quedaban fijos a un instante y a unas cuantas letras y números.

A falta de tierra y campos santos, el asfalto es la necrópolis posmoderna; ahí donde los vivos expulsan a los fantasmas y no se tiene la costumbre sana de guardar respeto. El cadáver urbano es público.

El muerto citadino es propiedad comunal y, ergo, limitada a la misericordia del ciudadano. Quizás una veladora, una sábana, tres plegarias, un escupitajo de mala suerte y el regreso a la rutina. ¡Pobre! Mira que morir en la banqueta.

Los familiares, cuando hay, son los últimos en enterarse. Después del vía crucis burocrático en delegaciones, hospitales y módulos de vigilancia, los deudos reciben el envoltorio carnal, el cuerpo que de tanto ir y venir se perdió en una avenida, un eje vial, o un crucero mal iluminado.

Sin embargo, los decesos dejan una estela perceptible. En el lugar exacto de la desgracia, un pedazo de tiza traza una cruz. Luego, con pintura de aceite, el dibujo alcanza permanencia, hasta que la imprescindible cruz de madera o metal marca lo que dure el destino de nuestro semejante.

La estética será secundaria. El motivo suaviza cualquier reclamación. Se trata de informar, denunciar y llorar un evento previsible y no.

Leemos: madre, padre, esposo, esposa, hijo, hija, nombres y años. Tocamos metal, mugre, hollín, bordes y fisuras. Vemos el color intenso, apagado, nuevo y viejo. Oímos el tránsito en movimiento. Los gritos de los voceadores. Los insultos de los conductores. La risa de los “cacharpos” en los peseros. A la megalópolis no le inquieta la estadística de la mortandad.

Enriquecida de rumores, impresiones a la carrera y el sabor de cada relator, la agonía del “difuntito” es ventilada en la cola de las tortillas, el mostrador de una tienda y en la reunión cervecera de la banda. Contar la desgracia ajena es un contraste de la propia, un alivio de saberse vivo, pues un muerto carece de utilidad.

En la época de los Palacios, cada muerte anónima posibilitaba el origen de un sitio: la Barranca del Muerto, el Callejón del Ahorcado, la Quemada. Desgraciadamente, la multiplicación de las muertes puso fin a la costumbre. Hoy, la Muerte, convertida en santa, efectúa su labor siguiendo el patrón de una línea de ensamblado.

Las cruces se tornan comunes y en esa mutación sirven de respaldo a la venta callejera, basurero “cool” y marca de cascarita futbolística; extensiones del barrio, la colonia y la cuadra. Heráldica de la violencia y el costo de la supervivencia citadina.

Este cementerio intermitente ocupa el perímetro total del Distrito y la zona conurbada. La multiplicidad de la colocación es aleatoria. Los símbolos tienen que llamar la atención.

Si el milagro fuera corto, bastaría la flor y la cera del aniversario, el retoque pictórico del decorado y la limpieza obligada, empero, la cruz puede ser milagrosa, atractiva o misteriosa. Espectros, lamentos y fenómenos inexplicables acompañan el ingenio (o la ingenuidad) del vulgo. “Esa cruz no es buena”. “Yo vide a un señor vestido de negro”. “Te acercas y te duele la cabeza”.

La sobrelectura de las cruces es peligrosa. La filiación judeo-cristiana no omite la intervención del “enemigo malo”, de “la pachona” y de los seudo “cazafantasmas” que se meten de enmascarados.

Un recuento numérico serio de las cruces es tarea imposible. En un día aparecen y desaparecen muchas. No es que algún vándalo se las lleve. Caen bajo el peso del tiempo y el olvido.

La Muerte Anónima, por darle una identidad, semeja a las vagabundas de pelos largos y sucios, harapos multicolores, voz alcohólica, biografía destrozada, que arrastran las penas a los cuatro puntos cardinales y espantan el discurso triunfalista de la esperanza.

Nuestra Muerte es un rabioso perro callejero y muerde recio. Ataca y desmadra. Es una matadora segura, diestra y perfecta; autosuficiente.

En consecuencia, las cruces que decreta son apresuradas. No cumplen los nueves días y se levantan. Contenido, menos forma. Jamás alentarán los grabados en piedra: “volaste al cielo presuroso, dejando a tus amigos desconsolados” o “voló rápido al cielo, llevándose sus galas por no manchar sus alas en el lodo del mísero suelo”. En la velocidad máxima de la globalización y la virtualidad real, el mensaje es el medio.

“Gansito”, “Chafomoa”. “Marioloco”, “Anemias”, “Puchungo”, “Casi”, “Tol”, “Guango”, “Teclas”, “Tochis”, “Pacha”, “Choche”, “Roñas”, “Seco”, los nombres de los ejércitos de la noche, que mueren en la guerra del territorio y la mercancía prohibida, y que se recuerdan en esa cruz inmensa de concreto eterno en la esquina de Carpintería y Mineros, en la colonia Morelos. Son muertos, pero de esos que hacen ruido y de los que nadie desea hablar.

Y leemos en otros rumbos: Yuri Morales Arteaga 11 de julio de 1976 – 1 de enero de 2003; Omar Sandoval “Gasparín” marzo de 2001; José Gabriel López Rodríguez 20 de febrero de 1975 – 1 de noviembre de l999; Víctor Hugo Carrizosa 3 de marzo de l999 y Carlitos A. Zariñana Fuentes 22 de octubre de l995 – 23 de noviembre de 2003.


Ahondando, tampoco todos los muertos citadinos costean la cruz. Todavía persiste la certeza de que la capital, posterior a los terremotos de l985, fue cimentada con los cuerpos y las mutilaciones de los desaparecidos. Por cada cruz tenemos cinco, diez, cien, mil muertos borrados del padrón de la Historia.

En la servidumbre de la MUERTE (con mayúsculas pesadas) los funerales anónimos apestan a alcohol rebajado y refresco de grosella, a drogas envenenadas, a explosión de vísceras, a sangre y gasolina, a fluidos corporales descompuestos.

domingo, 26 de octubre de 2008

VIDEOS: La llorona

Para un dodo oaxaqueño -¡que los hay!- la canción de "La Llorona" es un canto de amor y despedida que siempre -no importa la distancia- lo regresa al origen, a lo negro del plumaje de algunas dodas por las que puede dar la vida.

VIDEOS: Hasta los huesos

Un corto de animación mexicana que muestra directamente nuestra concepción del inframundo y que, por la temporada, resulta más que idóneo para verlo completo.

EDITORIAL

Dodos y no dodos:

Aunque es sabido que el mejor dodo es el dodo vivo, no falta quien opine lo contrario y actúe en consecuencia, por tanto, nuestra especie a punto de extinguirse debe de rendir honor a los miles de congéneres que la intolerancia, la gandallez, el hambre y la incomprensión humana los convirtieron en estampas de los libros de Zoología o en habitantes del Cerquita de Allá Dodo.

Así que a lo largo de esta semana iremos presentando diferentes materiales que hablan y cantan a la muerte (doda o no), que por extraños sinos hay algunas que son muy parecidas a las mexicanas.

Esperamos que no sólo sean los habituales amigos emplumados los que lancen sus palabras al ciberespacio desde este blog, sino también contar con los comentarios e ideas de los visitantes de esta página.

BIBLIONAUTAS: El Castillo blanco


POR: Marcia Trejo y Raúl Gómez Miguel


EL CASTILLO BLANCO. ORHAN PAMUK. MONDADORI. Ganador del Premio Nobel de Literatura 2006, Pamuk es un escritor, según el juicio de la Academia de Estocolmo, representativo del espíritu libertario que las letras universales contienen. Especialista en novelas de sabor, que no históricas, Orhan Pamuk trata de capturar el sentido renovador del constante ir y venir de Occidente a Oriente, y viceversa, que halla en la ciudad de Estambul el espacio apropiado para ofrecer testimonio de las conflictiva y ricas relaciones de dos mundos que aun hoy luchan por imponer una verdad, una concepción de las cosas en el más puro estilo de la modernidad tardía. Pamuk, en esta condición, es un turco universal, si eso es posible. Comparado en grandeza a Italo Calvino o Jorge Luis Borges y bendecido por los calificativos elocuentes de John Updike, el talento de Pamuk debe de servir como una invitación alegre al descubrimiento de los otros habitantes del eurocentrismo. Sin ser éste su mejor trabajo basta para aguijonear el interés y emprender la búsqueda de la Turquía fantástica que se revela en las páginas siguientes.

viernes, 24 de octubre de 2008

VIDEOS: Everybody knows

Como paráfrasis del mitológico Leonard Cohen aquí está una excelente canción que describe el México que vivimos, así que en cada "everybody knows" piense en "los mexicanos saben" y tendrán el cuadro perfecto de a dónde vamos con tanta imbecilidad improvisada.

jueves, 23 de octubre de 2008

BIBLIONAUTAS: La reina sin nombre


LA REINA SIN NOMBRE. MARÍA GUDÍN. EDICIONES “B”.


A caballo entre la literatura fantástica y una supuesta histórica, las aventuras de una mujer nacida para mandar en la España goda y la Francia merovingia da pie a la especulación sentimental de una escritora que ha leído a los clásicos de los géneros y que los copia con una exactitud funcional, al menos dentro de las expectativas de los habituales a estas narraciones. Sin otra pretensión que no sea la de agradar y dejar un margen a la imaginación ociosa, la novela no tiene pierde y conmoverá a dos que tres maduritas ganosas de amor aventurero. Desafortunadamente, la eficiencia también marca la limitada capacidad de propuesta y el regular rendimiento de la búsqueda personal. Ceñirse a un patrón no significa mejorar la voz personal o el oficio de contar historias. “La reina sin nombre” es un título ideado como la respuesta ibérica a las firmas recurrentes e importantes de las escuelas, que entre druidas, antiguos y clichés avejentados jala y promueve, eso sí, un rato entretenido.

EL DODO DICE: Entre dodos te veas...


CURIOSIDODOS: Al buen entendedor...

POR: Marcia Trejo

El refranero popular es un cúmulo de enseñanzas filosóficas de primera mano. Rebosantes de una visión elemental del universo, los dichos nutren el discurso cotidiano con el pensamiento lapidario de quien lo ha visto y comprendido todo. Sin embargo, ¿dónde nacen?, ¿qué universalidad les otorga el consejo?, ¿a qué exactamente se refieren?. He aquí algunas respuestas.

¡Como Pedro por su casa!
Esta expresión surge en el sitio y toma de Huesca por Pedro I de Aragón en el año 1094, en donde el rey entró al sitio como su casa que era. La frase quedó en la región, convirtiéndose en un dicho popular que se aplica a los entrometidos que se meten en asuntos y casa ajena.

En martes ni te cases ni te embarques

Esta superstición data del tiempo de los romanos en que este día se encontraba consagrado a Marte, dios de la guerra.

Ir por la lana y volver trasquilado

En la antigüedad a los blasfemos se les castigaba trasquilándoles de cualquier modo, de tal forma que quedaban expuestos a la vergüenza pública por ser evidente su pena. Se decía que volvían trasquilados.
Existe otra versión que hace referencia a las ovejas que se juntaban con otro rebaño que no era el suyo y regresaban después trasquiladas.

Se le fue el santo al cielo

Su nacimiento se atribuye a un predicador que estando en pleno sermón se le olvidó el santo del día cuyas glorias se proponía resaltar. Es por ello que esta frase se utiliza cuando alguien pierde el hilo de una conversación o sufre un lapsus.

Pasar la noche en blanco

Esta expresión se utiliza para decir que se ha pasado la noche sin dormir. Proviene de que antiguamente cuando algún joven iba a ser armado caballero de alguna de las órdenes religioso-militares de la Edad Media, tenía el deber de velar sus armas durante la noche, misma que pasaba orando vestido únicamente con una túnica blanca para significar su pureza.


Poner los puntos sobre las íes

Se recurre a ella cuando se quiere dar a entender que las cosas deben dejarse muy claras o que necesitan corregirse.

Su origen se remonta al siglo XVI, cuando se adoptaron los caracteres góticos en los escritos de importancia y a los copistas de aquel entonces les resultaba frecuentemente difícil distinguir la u de dos íes seguidas, por lo que se acordó ponerles punto a estas últimas. No a todos les agradó la idea por juzgarla un tanto quisquillosa y en ese sentido empezó a usarse la frase.

Salvarse por los pelos

En 1809 se publicó una orden en la que se obligaba a los marineros a cortarse el cabello. La situación provocó airadas quejas ya que, en numerosas ocasiones, en momentos difíciles o en un naufragio, muchos marinos habían conservado su vida por ser salvados por los pelos. Se consideró tan razonable la propuesta que la orden fue derogada. La expresión ha permanecido y describe cuando uno se salva de un peligro en el último instante.

Mantenerse en sus trece

Significa persistir con obstinación en un propósito o idea. La expresión nace como consecuencia de la actitud del obispo don Pedro Luna quien fuera elegido Papa durante la época del gran cisma. Don Pedro, que tomó el nombre de Benedicto XIII, no renunció jamás a su tiara, ni se dejó persuadir de que no era el verdadero Papa y los emisarios enviados desde Roma regresaban siempre repitiendo que en su retiro de Peniscola, él seguía manteniéndose en sus trece, aludiendo al número que le hubiera correspondido como Papa.

Despedirse a la francesa

En el siglo XVIII se puso de moda en Francia la costumbre de ausentarse de una fiesta sin despedirse ya que se consideraba de pésimo gusto interrumpir una agradable charla o reunión. De esta manera, se ponía de manifiesto que en realidad no existía tal ausencia y que en espíritu se continuaba estando ahí. La costumbre fue desechada pero la frase sigue repitiéndose cuando el caso sucede.

Hay moros en la costa

Durante muchos años las costas del Mediterráneo sufrieron ataques constantes de los moros o corsarios berberiscos. Los puntos más expuestos de los acantilados, tuvieron que buscar la forma de rechazar efectivamente las agresiones de que eran objeto, por ello se construyeron torres y murallas en las que se situaban vigías que, a la menor señal de peligro, daban la alarma: “Hay moros en la costa”. Lo que fue un grito de alarma ha pasado a convertirse en una advertencia para indicar que no deben cometerse indiscreciones o hablar en demasía.

Lágrimas de cocodrilo

Esta expresión surge de la creencia de que los cocodrilos lloran después de haber devorado a sus víctimas.

Ponerle el cascabel al gato

Suele utilizarse cuando se desea dar a entender que resulta muy difícil llevar a cabo una acción y su origen es una fábula muy conocida.

¿Quién te ha dado vela en este entierro?

Es muy probable que su génesis se encuentre en los entierros en los cuales se entregaban velas a los amigos de la familia o del difunto. Por lo cual, aquellos que sin serlo recibían una vela, podían considerarse entrometidos.

Tener muchos humos

Se utiliza esta frase para referirse a la gente que alardea en exceso. Su origen se remonta a la época de los romanos y particularmente a su costumbre de rendir culto a los antepasados. En un lugar de la casa, las imágenes de los predecesores aparecían como el más preciado de los bienes. Con el correr del tiempo, estas figuras se ennegrecían a consecuencia del tipo de iluminación; las más oscuras debido al paso del tiempo y a la acción del humo eran precisamente las más antiguas, y servían para demostrar que el linaje del dueño de la casa se remontaba mucho tiempo atrás.

¡Vete a la porra!

La porra era un bastón enorme, labrado y adornado con un puño de plata, que usaba antiguamente el tambor mayor de los regimientos cuando acampaban las tropas. Se clavaba en un lugar determinado y, cuando algún soldado debía ser castigado, se le enviaba a cumplir su arresto en el lugar donde se encontraba la porra. Hoy se utiliza cuando queremos deshacernos de alguien molesto.

Palos de ciego

Cuando se busca la solución a un problema utilizando varias formas, ya sea por ignorancia o por su dificultad, se suele utilizar esta frase. Su fuente se remonta a la época de Alfonso VII cuando se acostumbraban unos festejos que gozaban de gran popularidad por incluirse en ellos el espectáculo de dos ciegos armados de gruesos garrotes y rodeados de cerdos. Los invidentes debía localizar uno de los animales y matarlo a palos, con lo cual el cochino pasaba a ser de su propiedad. La “diversión” eran los errores de los sujetos y los golpes que se daban entre sí.

Cría cuervos y te sacarán los ojos

En cierta ocasión que el condestable de Castilla don Álvaro Luna se encontraba de cacería, encontró a un ciego que en lugar de ojos ostentaba dos viejas cicatrices. Don Álvaro con gran interés y compasión preguntó al hombre si había estado en la guerra; a lo que el aludido contestó: “No señor, las heridas de mis ojos no son heridas de guerra, sino de ingratitud”. Y contó a los presente su historia: habiendo encontrado un pequeño cuervo en el monte lo crió por espacio de tres años, llenándolo de atenciones y cuidados, sin embargo, cierto día en que lo estaba alimentando, el cuervo se le echó encima y le arrancó los ojos. Don Álvaro se volvió a sus compañeros y dijo: “Ya habéis oído, caballeros; criad cuervos para que luego os arranquen los ojos.”

domingo, 19 de octubre de 2008

MARASSA: Después de los Olímpicos

POR: RAÚL GÓMEZ MIGUEL

1. Vaya una larga ovación y un enorme reconocimiento a los cuatro atletas mexicanos que consiguieron dos medallas de oro y una de bronce en las Olimpiadas de Beijing 2008, a pesar de todos los obstáculos burocráticos y personales que identifican la organización del deporte mexicano.

2. Acusamos el cinismo de las autoridades de las federaciones deportivas de México que se estuvieron exhibiendo con el dinero público en TODOS los eventos distinguidos de la olimpiada y que no asumen la vergüenza de haber llevado una delegación de ochenta y cinco representantes con tan alta cuota de fracaso.

3. Destaquemos las pobres justificaciones vertidas por las “promesas” deportivas locales frente a la comprobación incuestionable de su mediocridad competitiva.

4. Meditemos en la complicidad mediática para que de antemano, el ánimo de la competencia fuera el clásico vamos a ver si se podemos.

5. Sería interesante Televisa explicara para qué hizo un gasto exorbitante llevando una producción con un año de antelación a China sólo para regalarnos una gama de predecibles coberturas cómicas y retardadas. Honestamente para lo hecho, bastaba con bajar la señal internacional y comentarla desde los estudios del Distrito Federal.

6. Bienvenidas a cuento las declaraciones del presidente de la República a los medallistas olímpicos cuando eran similares y carente del calor humano que es moda entre los políticos patrioteros.

7. China demostró al mundo que cuenta con la capacidad suficiente para encarar a cualquiera en eso del liderazgo global. Dinero, organización y presencia pusieron a Beijing 2008 en un sitio difícil de superar dentro de cuatro años en Londres, Inglaterra.

8. Esperamos con sonrisas irónicas la pataleta pública de los funcionarios deportivos ahora que retornan con la bolsa vacía y sus recomendados de cuarta. Ya sabemos que trabajarán arduamente para que en los próximos Juegos Olímpicos los mexicanos sirvamos para algo más que hacer desfiguros en las tribunas y gritar porras albureras.

9. Caiga quien caiga, la gentuza federativa se mantendrá en el hueso, perdón, en el puesto.

10. Como chinitos estuvimos los mexicanos atestiguando el triunfo y el orgullo ajenos con la terrible certeza que la derrota nos costó cara pero ayudamos a que los oportunistas de lujo hicieran de las suyas.

11. Nos consta, precisamente en nuestros campeones olímpicos, que México ganará cuando lo haga solo sin permisos de oficinas kafkianas o venias partidistas; los mexicanos de a pie tenemos mucho que ofrecerle al mundo.

12. En el habitual valemadrismo institucional y la omisión racista de los medios, la delegación paraolímpica mexicana está lista para comprobarnos que el espíritu y la actitud son indispensables para la victoria y que traerán medallas sin reparar en olvidos o protagonismos estúpidos. Bien por ellos y por el pueblo que representan.

13. En México 68, un hombre ganó una medalla de oro y cuarenta años después sigue siendo quien dicta el rumbo de la especialidad desde un escritorio; cosas del deporte tricolar y la polaca malsana, ejemplo del porqué en el país nunca pasa nada, ni la actualización ni la vanguardia.

sábado, 18 de octubre de 2008

EL SONIDO DE LOS DODOS: Wild World

Aquí les presentamos la letra de la canción de la semana, "Wild World", interpretada por Cat Stevens y perteneciente al disco "Tea for a Tillerman".

Now that I've lost everything to you
You say you wanna start something new
And it's breakin' my heart you're leavin'
Baby, I'm grievin'
But if you wanna leave, take good care
Hope you have a lot of nice things to wear
But then a lot of nice things turn bad out there

CHORUS:
Oh, baby, baby, it's a wild world
It's hard to get by just upon a smile
Oh, baby, baby, it's a wild world
and I'll always remember you like a child, girl

You know I've seen a lot of what the world can do
And it's breakin' my heart in two
Because I never wanna see you a sad girl
Don't be a bad girl
But if you wanna leave, take good care
Hope you make a lot of nice friends out there
But just remember there's a lot of bad and beware

CHORUS

jueves, 16 de octubre de 2008

CURIOSIDODOS: Curiosidades animales


POR: Silvia Trujillo





Las vainas en que se guardaban las cimitarras en Medio Oriente se hacían de cuerno de antílope orix.

* * *

El avestruz es el ave más grande que existe; las plumas de la hembra son grises y café y las de los machos negras salvo en las alas y la cola que son blancas; pueden alcanzar velocidades de hasta 70 kilómetros por hora.. Suelen formar grupos en los que se incluye un macho y cuatro o cinco hembras; el macho y la hembra dominantes establecen turnos para incubar los huevos, la hembra lo hace durante el día y el macho en la noche.

* * *
El tiempo de gestación del rinoceronte blanco es de 490 días dando a luz sólo una cría; siendo adultos alcanzan un peso que oscila entre los 2,000 y los 3,600 kilogramos.

* * *

Los hipopótamos alcanzan entre 2,500 y 4,500 kilogramos de peso. Tienen la particularidad de poder abrir el hocico en un ángulo de 150° y sus colmillos miden un poco más de medio metro. Los hipopótamos tienen una piel bastante delicada, por ello tienen que permanecer de forma constante en el agua para evitar que se dañe, asimismo secretan un líquido de tonalidades rojizas cuyo objetivo es lubricar la piel, esta peculiaridad dio lugar a la creencia de que sudaban sangre.

* * *

El tiempo de gestación del canguro gris es de 32 a 38 días, tras los cuales nace una cría de apenas unos centímetros que se aloja en la bolsa o marsupio ubicado en el vientre de la madre donde permanece 300 días. La cola del canguro que alcanza el metro de longitud posee dos funciones: por un lado, sirve de apoyo cuando está de pie o sentado y, por el otro, es una especie de timón durante los saltos, mismos que pueden ser de hasta 9 metros.

* * *

El águila real posee una altura que oscila entre los 90 y los 110 centímetros, con una envergadura superior a los dos metros. Las águilas alcanzan la madurez sexual a los 5 años de edad y suelen formar parejas que duran toda la vida, llegan a vivir entre 50 y 60 años. son grandes cazadoras que suelen esperar posadas a que pase alguna presa, son capaces de alcanzar una velocidad de 160 km/h cuando se lanzan en picada.

* * *

Los flamencos son capaces de reconocer a sus crías entre miles de polluelos.

* * *

Los búhos cornudos no construyen nidos sino que utilizan aquellos que halcones, garzas o águilas han abandonado. La palabra búho viene del latín bubo que quiere decir ave nocturna.

* * *

El halcón peregrino es la criatura más veloz de todas ya que es capaz de alcanzar una velocidad de vuelo en picada que llega hasta los 320 kilómetros por hora.

* * *

El periodo de hibernación del oso negro en Alaska dura seis meses; en cambio en nuestro país permanece despierto todo el año.

* * *

El mapache tiene la costumbre de remojar sus alimentos en agua porque ello les permite desgarrarlos y mezclarlos con mayor facilidad. Otro de los nombres con que se le conoce es osito lavador.

* * *

El zorrillo listado puede lanzar hasta a seis metros de distancia y con muy buena puntería el almizcle o líquido de terrible olor.

* * *

El lobo del ártico puede olfatear una presa a una distancia de hasta dos kilómetros.

* * *

El ciervo canadiense o wapití tiene cuernos que superan el metro y medio de largo y llegan a pesar alrededor de 11 kilogramos.

* * *

El tigre de Sumatra puede llegar a ingerir hasta 40 kilos de carne en una sola comida.

* * *

El ocelote también es llamado xacxicin, tigre gallinero, manigordo, ocelotl, chibiguazu o gato tigre.

AD: Individuo y consumo. La nueva frontera

POR: RAÚL GÓMEZ MIGUEL

Suena a paradoja pero la Mercadotecnia, la Publicidad y las Relaciones Públicas en este principio de siglo regresan al origen.

Sí. Después de plantear el horizonte de la sociedad de masas y la globalización universal, estas tres disciplinas reculan y aceptan que las bondades del mercado global masivo no se traducirán en mejores opciones productivas y financieras.

El sueño de un mundo para todos, cruje frente a la expectativa empresarial de crecimiento. A la gente común el asunto de parecerse a otro no le agrada. Quizás está dispuesto a compartir un ideal pero alentando un matiz particular.

El “geomarketing” es un adelanto en esa dirección. Ahora, el interés del individuo mueve a las corporaciones a invertir en el conocimiento exacto de los componentes particulares de cada estrato social, y no en deducir generalidades.

Es posible que en el futuro inmediato, la publicidad retome esta posibilidad a la hora de planear la comunicación de anuncios, y genere mensajes dirigidos a un ciudadano en específico que de complacerlo, aceptará producto, marca y compra.

El caso de las relaciones públicas es muy interesante. De las tres disciplinas mencionadas, ésta se localizaba en el campo de batalla y de ahí planeó una trinchera que la llevara victoriosa a la nueva centuria.

Lejos de ignorar al individuo, las relaciones públicas se comprometieron a darle un papel protagónico que posibilitó sumar importancia en los ciclos productivos sociales. Personalizar destinatario, la ubicó en el primer mundo, a fines de los años noventa, como una opción de rentabilidad real frente al desperdicio presupuestario de la publicidad.

Hoy, las relaciones públicas venden presencia y productividad con mecanismo y estrategias baratos y eficaces, ceñidos a respetar la individualidad de su público.

Justo cuando se habla de la próxima guerra de mercados globales, los especialistas en consumo advierten que la situación se ha complicado.

Pese al auge económico de China y el advenimiento de otros centros maquiladores como la India o Pakistán, los centros consumidores por excelencia, con los Estados Unidos a la cabeza, detectan que lejos de aprovechar las oleadas de productos masivos que llegan de todos los puntos posibles del orbe, el comprador aguarda por el producto de sus sueños; ese que fue elaborado para satisfacerlo a él y no a las huestes anónimas del planeta.

El consumidor quiere un nombre y un apellido, desea que los implicados en el proceso de producción sepan que es diferente, irremplazable y de decisiones seguras.

Es probable que un par de años veamos una transformación radical en los mensajes, medios y vehículos publicitarios, además de la estadística, estrategia y modelos de mercado.

Es seguro que un día despertemos para toparnos con una campaña publicitaria, por ejemplo, cuyos anuncios se expongan en medios y vehículos diferentes para la esquina de nuestra casa, la parada del autobús, el espectacular de la otra cuadra.

De perfeccionarse la infraestructura humana y tecnológica es posible que pronto la publicidad nos hable de tú, sepa nuestros datos generales, gustos y disgustos, y nos venda un sueño propio al que no nos podremos rehusar.

Para quien dude lo aquí expuesto, lo invito a navegar por la red mediante el término “geomarketing” y que se percate por donde se está cociendo el pastel.

La aplicación exitosa de esta manera de trabajar la comunicación de carácter comercial, permitirá un giro interesante en la propaganda y los demás componentes de la comunicación social.

Es evidente que el pleno conocimiento del individuo encierra una amenaza totalitaria de control. Sin embargo, recordemos, partiendo de esa falacia mal llamada “publicidad subliminal”, que el alcance de un mandato depende del grado de complicidad que el individuo genere. Nadie es dueño de la mente ajena.

Sólo me resta subrayar que esta aparente paradoja disciplinaria refleja una certeza personal: la razón siempre será la última frontera de la libertad.

domingo, 12 de octubre de 2008

VIDEOS: Abuelito, dime tú

Una postal del mundo en el que viven las autoridades de nuestro país en este momento de crisis mundial; suponemos que los sonidos que escuchan son precisamente los que nos han llevado a tanto desastre. Aunque no podemos dejar de preguntarnos ¿quién será el abuelito?

EL DODO DICE...Dodos Imperiales (Frescos de Pompeya)


BIBLIONAUTAS: Guía de seres fantásticos del México prehispánico


GUÍA DE SERES FANTÁSTICOS DEL MÉXICO PREHISPÁNICO
Marcia Trejo. Editorial Vila.


Aluxes, gigantes, animales híbridos y entidades con los más diversos poderes deambulan entre estas páginas, en espera de un lector que los recree.

Frente a este milenio, e inmersos en la crisis de los dogmas y la fe, es importante voltear al pasado. En oposición a la ortodoxia sociológica, que parece decir “si no estudias obreros, indígenas de moda o mujeres, no haces sociología”, esta obra rescata del olvido un aspecto fundamental de la cosmovisión y la vida cotidiana de pueblos hoy reducidos a las vitrinas polvorientas de los museos: los seres fantásticos residentes en el universo mágico-religioso de las culturas más importantes del México Prehispánico, presentando la fantasía como una explicación alternativa a la frialdad de la ciencia y el juicio obstinado de aquellos que niegan todo sin comprobar algo.

Lejana de toda solemnidad y enriquecida con más de cien ilustraciones, la Guía de seres fantásticos del México Prehispánico es una referencia significativa para la comprensión de un mundo mítico ya ido, pero cuyos seres aún habitan en las creencias de la gente. Sin duda, una lectura muy disfrutable para cualquier edad; sólo requiere un poco de imaginación y el deseo de aventurarse en un universo que supera al del sueño.

Sin apoyo de la editorial, el libro se ha movido solo, llegando a lugares lejanos como algunos países de Asia, y ganándose comentarios positivos en diferentes idiomas que, incluso, la autora desconoce. Convencida de la originalidad del proyecto, La guía (o debemos decir que los seres que la pueblan) se la ha arreglado para decirle al mundo que el imaginario mexicano está vivo y campante, esperando a cualquier mente inquieta que desee conocerlo.

En la opinión de don Enrique Loubet, el periodista más premiado en la historia de México y uno de los pilares de la crónica política del siglo XX, la obra desprende la siguiente reflexión:

“Se dice que los libros existen cuando se leen, y Marcia Trejo ha multiplicado los panes, pues en un tomo reúne cientos de referencias bibliográficas de no menos inteligencias abocadas a la memoria, para concretar un acercamiento a un tiempo histórico poco conocido en el que los hombres, en el afán de explicarse realidades, iniciaron la construcción de un universo paralelo de criaturas que responden a los porqués de la vida. Es también una llamada de atención sobre la riqueza cultural casi virgen que se guarda en los acervos y bibliotecas de todo México”.

Por último y sin ser menos importante, sabemos que Marcia Trejo Silva es socióloga por la UNAM, titulada con mención honorífica. En 1990 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo, otorgado por el Club de Periodistas de México. Desde hace más de una década coordina la Sección de Libros de Revista de Revistas de Excélsior y ha publicado numerosos artículos de temas sociopolíticos y culturales. Es docente universitaria y dictaminadora literaria de proyectos televisivos. Actualmente dedica parte de su tiempo a la investigación del imaginario fantástico de México.

MARASSA: Recomendaciones para sobrevivir la crisis económica mundial que según nuestro gobierno casi no existe

POR: Raúl Gómez Miguel

1. Por tendencia capitalista natural, los pobres se volverán más pobres y los ricos menos ricos como quisieran.
2. Guarde la calma como sea al pertenecer a las mayorías abandonadas por la fe, la esperanza y la caridad encontrará la manera de “irla pasando”, así lo ha venido haciendo desde tiempos inmemoriales.
3. Recuerde: la economía nacional está blindada, aunque no se sabe si para que por el peso se hunda o resista la falta de dinero.
4. Sea positivo y únase a la causa de los kilos menos por el país, de esta manera adelgaza, sale en la televisión y no le falla al gobierno en eso de amarrarse el cinturón.
5. Ahorre para cualquier contingencia, en especial ,si el ingreso no le alcanza.
6. Invéntese un empleo extra, no va a ganar mucho, pero estará entretenido para no pensar en las desgracias por venir.
7. Crea en el Presidente de la República que a pesar de todos sus errores insiste en la existencia de un país que él sólo puede ver.
8. Descanse, estamos en buenas manos: secretarios de estado que no sabían el tamaño era la bronca, políticos que no se venden a menos que les lleguen al precio, periodistas fatalistas que cobran puntualmente y la compañía de la “Crisis” personaje que aquí es tan viejo como el Coco y que nunca nos dejará.
9. Compre dólares, sí esos tres o cuatro que están a su alcance y siéntase que hizo el negocio de su vida.
10. Para que no se deprima piense en otras causas perdidas como el Teletón y cuanto jolgorio se inventa para aprovecharse de la desgracia ajena.
11. Y repita este mantra: México está a salvo, inventado por los ganadores eternos.

martes, 7 de octubre de 2008

LA STREGA: Vampiros: un acercamiento a su función social


POR: Marcia Trejo


A lo largo de la historia humana, la línea que marca la separación entre el espacio de lo existente y el de la ficción ha tendido a cobrar mayor definición, claridad y precisión. Los personajes fantásticos ya no invaden, con tanta facilidad, la vida cotidiana. Tal parece que han partido al exilio, o por lo menos, eso hemos querido creer.

La humanidad gracias a los numerosos avances científicos, médicos o tecnológicos ha arrinconado a los demonios y demás criaturas, al arrancarles sus disfraces o explicar sus causas. Ha pretendido, fundamentándose en las tradiciones empiristas y racionalistas, lograr una percepción distinta y más exacta de lo real. Sin embargo, sus esfuerzos no han sido por completo exitosos. Y ello se debe a que, si bien ha sido capaz de encontrar diversas explicaciones científicas a los fenómenos, ello no quita que éstos puedan aún causar estremecimientos involuntarios ante la posibilidad de que sean ciertos.

Pero, vayamos atrás en el tiempo, retrocedamos algunos siglos y milenios. En esa época, lo mítico y lo real se entremezclaban, no necesariamente constituían mundos aparte, más bien se enfrentaban y coexistían entre sí sin que ello necesariamente revelara una contradicción. En consecuencia, tal coexistencia de espacios de realidad guiaba y condicionaba la conducta, así era igual de válido evitar ciertos comportamientos para no ofender a los espíritus de los bosques que no ingerir ciertas hierbas debido a sus propiedades venenosas.

El individuo todavía mantenía una estrecha relación con el medio natural que le rodeaba y del que obtenía su sustento; al no existir esa sensación de separación o extrañamiento, obviamente, era susceptible de hacerla extensiva a sus relaciones consigo mismo y con el grupo al que pertenecía. Por lo anterior, no habían motivos suficientes para que estableciera un divorcio con su mundo interno, ya que interior y exterior eran caras de una misma moneda. Y es precisamente este tipo de espacio el que deviene en terreno fértil para que el vampiro pase a ocupar un sitio de honor en el top ten del las criaturas terroríficas.

Los vampiros fueron reales –que no necesariamente existentes- y, en la actualidad, siguen siéndolo pero en menor medida debido a que esta unidad cósmica se ha escindido. El vampiro no tenía existencia tal como puede tenerla el mouse que en este momento tiene en la mano, es decir, carecía de materialidad, al ser un producto de la mente no era tangible y rompía la definición de materia como todo aquello que ocupa un lugar en el espacio. Empero, era real, como pueden serlo sus emociones o pensamientos; esto es, su realidad depende de nuestra capacidad de conceptualizarlos y conocerlos. Lo anterior no implica necesariamente que tengan menos fuerza, si no recuerde las cacerías de brujas acusadas de vampirismo o las olas de terror histérico desatadas por tales creencias. Cuando tenían una existencia material, es decir, que se les podía ver y sufrir sus efectos, lo que realmente existía no era un vampiro sino una persona a la que se le consideraba como tal, independientemente de que esta divergencia fuese o no percibida.

Comprender de qué forma el vampiro llegó a obtener tal relevancia, implica tomar en consideración el proceso de socialización, a través del cual las personas que pertenecen a un grupo social aprenden y hacen suyos los valores, creencias, normas así como las formas de comportarse consideradas válidas para ese tiempo y espacio. Si un niño se ve rodeado y se le enseña a llevar a la práctica o evitar ciertas conductas sustentadas en una determinada creencia, y este proceso se repite a lo largo del tiempo, naturalmente el pequeño lo aprenderá; si sumamos a ello, que tal forma de actuar y comprender el mundo se valida una y otra vez a lo largo de su vida, en consecuencia, el individuo continuará creyendo en ello y, obviamente, su accionar será congruente a tal universo mental.

Por supuesto, el proceso arriba descrito no es sencillo ni instantáneo, y no afectó de forma exclusiva a los vampiros, debe ser considerado en su estrecha relación con los demás elementos que conformaban las diferentes culturas y sus características explicaciones del universo. La creencia en los vampiros, al ser parte de una cultura, es compartida por un mayor o menor número de los integrantes de ésta. Además de haber llegado a ser parte de los individuos, éstos obtienen una serie de ventajas al mantener tal creencia, este proceso por supuesto que tiene raíces inconscientes. El hecho de compartir una visión del mundo abre la posibilidad a los seres humanos de comprobar de forma continua que pertenecen a algo, que tienen iguales, que son parte de un grupo; al tiempo que les hace posible evitar una serie de sanciones en caso de no adherirse a tales pautas. Por ejemplo, se pueden citar las múltiples muertes “producidas” por vampiros, gracias a las cuales se tomaban represalias contra aquellos individuos que tuviesen alguna costumbre diferente y, por ende, sospechosa.

Tener una serie de usos en común hacía posible la cohesión grupal, esto es, se erigía en un enlace entre ellas y hacia el grupo del que formaban parte. Tal unión daba a la comunidad posibilidades de permanecer y mantener cierto grado de estabilidad.

Pero el vampiro tuvo también otras funciones. Constituyó y fue utilizado como una proyección. Recordemos que no existían los adelantos científicos y médicos de la actualidad; las epidemias y la desnutrición generaban altos niveles de mortandad; ciertas enfermedades eran sinónimo de muerte segura; además debemos sumar a ello las prolongadas jornadas de trabajo, la alimentación e higiene deficientes, así como una serie de remedios que con frecuencia resultaban contraproducentes tales como las sangrías. Asimismo, en aquellos ayeres el que una persona fuera fotosensible, que presentara problemas cutáneos, dientes enrojecidos u orinara con una tonalidad rojiza, era fácilmente achacado a su naturaleza vampírica ya que la investigación médica no conocía el padecimiento congénito llamado porfiria que se manifiesta a través de los síntomas anteriores. En este marco, el vampiro se convierte en el agente y responsable directo de tales fallecimientos, en él se proyectaban o depositaban ciertos males. Se peleaba contra el vampiro en un afán de luchar contra las enfermedades y la muerte, ya que de él era posible defenderse usando ajos o crucifijos, y se le podía aniquilar clavándole una estaca en el corazón y exponiéndolo a la luz del sol. Estamos ante un intento de resolución de situaciones conflictivas y de control del entorno a través de prácticas y rituales, que si bien hoy pueden resultarnos folkies o hasta ridículos, en tales realidades históricas se los tenía por verdaderos. Al realizar esta proyección, el ser humano intentaba cobrar su cuota de poder sobre el medio que le rodeaba y del que dependía, un control sobre la vida y el destino, buscando con ello contrarrestar la sensación de desamparo producto de la impotencia ante las fuerzas naturales.

Su tarea de control social en ciertos espacios resulta evidente, tal es el caso de Grecia donde se creía que todo aquel que se hubiera suicidado, que no fuera enterrado cumpliendo escrupulosamente los ritos pertinentes, haber muerto sin bautizo o ser practicante de la magia negra, inevitablemente se convertía en vampiro.

El vampiro nació y murió por obra del hombre, fue la fe humana lo que le dio vida; pero también –cual el monstruo del doctor Frankenstein- lo rebasó y, unido a una serie de factores coyunturales, se convirtió en germen de ingentes olas de terror e histeria que tantas víctimas cobraron.

BIBLIONAUTAS: Las 33 estrategias de la guerra


LAS 33 ESTRATEGIAS DE LA GUERRA
ROBERT GREENE
EDITORIAL: OCEÁNO

POR: Raúl Gómez Miguel y Marcia Trejo


Es un hecho comprobado que dentro de la Publicidad y la Mercadotecnia, el pensamiento y la práctica de la estrategia constituyen un valor profesional insustituible y, por ende, una marca distintiva que jerarquiza a los hombres y las instituciones que lo estructuran correctamente.

A lo largo de nuestra formación especializada hemos consultado las grandes obras del tema y las aproximaciones que especialistas hacen a los pensamientos de los reconocidos estrategas universales de todos los tiempos. Pero en esta materia un requisito es indispensable: sólo se aprende ejerciendo.

Por ello nos resulta útil que alguien se tome la gentileza de reducir, que no resumir, las enseñanzas de la estrategia y las explique a través del ingenio de celebridades como Sun Tzu, Napoleón, Maquiavelo o Clausewitz. El trabajo en sí es difícil y los alcances trascendentes, en especial, porque al igual que el amor o el sexo, en esto de la estrategia cualquiera dice saberlo todo sin meditar que tan real es su apreciación.

Robert Greene, a diferencia de muchos que dicen intelectuales y autoridades de la estrategia, ha conseguido el reconocimiento público mediante el suministro de herramientas básicas para la comprensión del fenómeno. “Las 48 leyes del poder”, libro publicado en inglés durante 1999, trazó una forma válida de acercar al gran público a los rincones del mando y la autoridad usando la compilación y la definición de un esquema eje que diera validez a las observaciones del autor.

“Las 48 leyes del poder” se tradujo al español en 2000 por la Editorial Atlántida repitiendo el éxito de ventas que había alcanzado en los Estados Unidos y terminó por convertirse en un texto formativo para diferentes carreras universitarias.

“Las 33 estrategias de la guerra”, Océano 2007, repite el modelo y profundiza en la técnica que otorga el mando y la autoridad, enfatizando los elementos rigurosos que, a su juicio, dotan a los individuos de los recursos indispensables para alcanzar metas y derrumbar obstáculos.

En este segundo libro, Robert Greene toca el aspecto menos atractivo del magnetismo político, plantea el trabajo permanente que implica ganar voluntades y obrar en consecuencia. Otra vez, los maestros de siempre acuden a sustentar cada apartado de la hipótesis correspondiente enalteciendo la clandestinidad irrenunciable que respalda la aclamación de la gente.

A quienes ejercitamos la comunicación social en cualquier forma, el libro es una lectura obligada, ya para reflejar nuestro trabajo o ya para enmendar los errores que lo empañan. La estrategia de la guerra no es ajena a la difusión e impacto de mensajes sociales; es garante de que las metas serán cumplidas y los intereses satisfechos.
Superior a cientos de títulos apadrinados por editoriales vinculadas al ámbito empresarial y de negocios, la obra es sincera, exhaustiva, inteligente, honesta y útil. No trata de ganarse a nadie y simplemente se regula por el sentido común y las variantes adecuadas. Aquí no se socorre a la historia de éxito o el caso Selecciones. Aquí se regresa a la Historia y los momentos decisivos que han forjado cuanto somos. En estas páginas no hallamos aquello que nos gustaría, topamos con lo que nos es necesario. No se le dan palmadas en la espalda al respetable; se le indica que TODAS las decisiones que tome y no tendrán repercusiones que son exclusivamente de su responsabilidad.

Pocas veces un documento puede resistir tantas lecturas y salir airoso. Los libros de Robert Greene no tienen pierde. Se leen por gusto, urgencia o cierto masoquismo sádico. No importa, el punto es reconocer en las voces de los siglos la advertencia, el consejo o la máxima para no repetir estupideces o tropezarnos con la misma piedra. Pongamos que son lecciones preventivas a prueba de idiotas.

Hágase un favor a usted y los demás, y consuma esas líneas, reconozca que no hay nada nuevo bajo el sol o que sólo rescatamos lo que hemos olvidado, y asista a la recuperación de la condición humana y a la maravillosa experiencia de vivir como se nos dé la gana aun bajo la admiración de los detractores.

domingo, 5 de octubre de 2008

VIDEOS: Zorba, el griego

En estos días de desesperación siempre hay que recordar que la libertad comienza con un baile, por ellos, por los otros, por los nuestros y por los muertos...