POR.- RAÚL GÓMEZ MIGUEL
Es de sobra conocido. Un secreto a voces. La explicación definitiva de porqué las instituciones públicas están para el perro.
Cerca de 30 mil servidores públicos de la administración federal son analfabetos, no han terminado la primaria o la secundaria, dio a conocer Juan de Dios Castro Muñoz, director general del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA).
Sin embargo, ello no les impide ser corruptos, ineficientes, prepotentes y unos auténticos desgraciados, al considerar que el puesto que ocupan se lo deben a la inteligencia natural de la transa.
Al encabezar la ceremonia en la que 24 dependencias, de las 226 que hay en el gobierno federal, recibieron reconocimientos por haber quedado “libres de rezago educativo”, dijo que de entre los más de 33 millones de mexicanos que no han terminado su educación básica se ubicó a 30 mil que realizan tareas en la administración federal.
Estos jijos de María Morales no conocen la vergüenza ni por equivocación. Lo suyo es hacerse rosca y cobrar puntualmente el chequecito que les recompensa la mediocridad límite.
La cantidad total de personas, de más de 15 años, que no han concluido su educación básica en México, implica un gran reto para el INEA, ya que equivale a atender a la población total de Canadá, sin las ventajas que esa nación tiene.
La situación es complicada, si sólo 2.9% del presupuesto que se destina a la educación se canaliza para enfrentar esta situación de rezago. A menos que el punto sea el dominio gubernamental fincado en la ignorancia.
La población mexicana, que es mayor a los 15 años, no siempre está dispuesta a acabar con su condición de rezago. Luego acaban con “huesos” mayores.
Cerca de 26 dependencias federales no han dado respuesta al diagnóstico para identificar a la población analfabeta, a los que no han concluido la primaria o la secundaria. La Administración Portuaria de Guaymas, la Comisión Nacional de Vivienda, Hospital General de México y el Hospital Doctora Manuel Gea González, entre otras.
Entre las instituciones que ocupan los primeros lugares con mayor número de servidores públicos federales en rezago se cuentan el IMSS, el ISSSTE, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Sin meter en el saco a los pelmazos metidos a representantes populares, que diariamente dan cuenta puntual de la ignorancia absoluta.
Sabiendo que se predica en el desierto, el INEA trabaja un programa piloto con 72 bachilleratos tecnológicos para hacer un diagnóstico sobre el número de jóvenes que están en condiciones vulnerables de abandonar la escuela.
Por supuesto que el impacto de la noticia en la opinión pública es desalentador, pues es de sobra admitida, las autoridades tampoco harán gran cosa por enderezar el barco y, simplemente, “aguantarán vara” para medio cumplir las obligaciones y ensartarse al ciudadano mediante una burocracia que refleja los peores vicios de nuestra sociedad.
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