ASUNTOS EXTRANJEROS: EXPORTANDO CARNICERÍAS

POR.- RAÚL GÓMEZ MIGUEL

El sábado 14 de mayo de 2011, ocurrió una de las peores masacres en Guatemala desde que terminó la prolongada guerra civil en el país, y fue cometida por el cártel mexicano de Los Zetas, aseguraron autoridades..

La marca de la violencia de ese cártel de las drogas podía observarse en la manera en que fueron encontrados los 29 cadáveres de la matanza: atados, decapitados y dispersos en un terreno cerca de sus cabezas cercenadas, resaltó el ministro guatemalteco del Interior, Carlos Menoc

Dos niños y dos mujeres fueron hallados entre las víctimas de la masacre, quienes en su mayoría laboraban en la finca lechera donde fueron hallados los cuerpos.

"No sé cómo sobreviví", declaró una persona que la Associated Press se abstuvo de identificar porque las autoridades creen que su vida corre peligro.

El hombre contó que permaneció tendido en el piso simulando que estaba muerto durante el ataque y que así se quedó hasta que la policía llegó a la mañana siguiente.

El sobreviviente era trabajador de la finca, ubicada en la provincia norteña del Petén, una región rural y selvática que por mucho tiempo ha sido una popular ruta para el transporte de drogas procedentes de América del Sur.

Sostuvo que desconocía a Salguero, pero indicó que la finca producía leche y queso en el municipio de La Libertad, cerca de la frontera con México.

Un grupo numeroso de hombres armados llegó al lugar la noche del sábado y rodeó a los trabajadores, recordó. Fue atado como los demás, y sufrió heridas con machete.

Los atacantes no se identificaron, pero dijeron que volverían, agregó.

En uno de los muros de la finca fue dejado un mensaje escrito con sangre, el cual decía que los atacantes buscaban al dueño de la finca, Otto Salguero.

El Ministro Menocal senaló que las autoridades trataban de indagar más sobre Salguero, cuyo paradero se desconoce.

El presidente Álvaro Colom llegó al Petén el lunes y recorrió el sitio de la masacre, que es un grupo de edificios abandonados y corrales en medio de un valle.

En diciembre de 2010, Colom impuso un estado de sitio militar en la vecina provincia de Alta Verapaz en un intento por recuperar sitios tomados por Los Zetas.

Esta banda de sicarios fue fundada por ex soldados que trabajaban como asesinos a sueldo del cartel del Golfo en México antes de trabajar por su cuenta y convertirse en uno de los grupos criminales más violentos de la región.

Los Zetas han sido responsabilizados por dos recientes masacres en México: 183 cadáveres hallados en tumbas colectivas el mes pasado y la matanza de 72 migrantes en agosto, ambas en el estado de Tamaulipas, fronterizo con Estados Unidos.

La policía guatemalteca está investigando si el ataque en la finca está relacionado con el asesinato de Haroldo León, ocurrido el sábado en otro hecho separado, y quien era hermano del presunto narcotraficante guatemalteco Juan José "Juancho" León.

"Juancho" fue muerto en 2008 en una emboscada que las autoridades guatemaltecas atribuyeron también a Los Zetas, quienes se han fortalecido en el área a causa de la debilidad de las instituciones locales del orden, la corrupción y la proximidad con México.

Los Zetas comenzaron a controlar el tráfico de cocaína en la región de Alta Verapaz en el 2008 tras matar a "Juancho" León.

De acuerdo con el Reporte Mundial de Drogas de la ONU en el 2010, la norteña provincia de Petén ha sido desde hace tiempo una zona estratégica para el narcotráfico, con pistas de aterrizaje en la selva usadas por varios cárteles.

Tiene una de las mayores tasas de asesinatos en Guatemala, que es uno de los países más violentos en el mundo.

Tanto Los Zetas como el también cartel mexicano de Sinaloa tienen intereses en el Petén y pudieran estar disputándose territorios, de acuerdo con el informe.

Preocupa que dada las condiciones, el crimen organizado mexicano recurra a la exportación del terror para incendiar América Central y exhibir a México como responsable directo de tal accionar.

No obstante, Felipe Calderón cree en la derrota de los delincuentes.