POR.- RAÚL GÓMEZ MIGUEL
Que las palabras sean puestas en piedra, en caso de olvido. Que el dolor de miles de mexicanos no facilite el borrón. Que quien las expresó las sostenga en los sesenta segundos siguientes a la perdida de la Presidencia de la República. Que tenga una larga vida para que reciba todo el desprecio que merece.
El presidente Felipe Calderón respondió a Javier Sicilia que la situación sobre la lucha contra el crimen sí es de pedir perdón por las víctimas, pero se equivoca el poeta, afirmó, al pedirse el retraimiento del gobierno federal.
"Ahí sí, Javier, estás equivocado", soltó Calderón en tono enérgico y golpeando con la mano el atril, y luego aceptó que actuó con aciertos y errores.
"Contra lo que se ha dicho que fue irresponsable actuar, pienso sinceramente que lo verdaderamente irresponsable hubiera sido no actuar. Sí efectivamente, el Estado tiene responsabilidad y tienes razón, pero no haber cumplido todos los órdenes de gobierno con su deber de proteger la vida de las víctimas y en ese sentido todos los que integramos el Estado somos responsables.
"Y coincido en que debemos pedir perdón por no proteger la vida de las víctimas pero no por haber actuado contra los criminales que están matando a las víctimas, eso definitivamente es un error y en eso, Javier, sí estás equivocado -dijo y golpeó la mesa-. Sí, sí es de pedir perdón por la gente que murió a manos de los criminales, por no haber actuado contra esos criminales. Pero si de algo me arrepiento en todo caso no es de haber enviado fuerzas federales a combatir criminales que nadie combatía por miedo o estaba comprado con ellos.
"De lo que me arrepiento es de no haberlos mandado antes y tener un operativo justo en Cuernavaca que pudo haber atrapado a la banda que mató a Francisco (Sicilia)", dijo Calderón.
Aseguró que a él le duelen terriblemente las fosas de Tamaulipas, migrantes asesinados, víctimas de secuestros como Fernando Martí y Silvia Vargas o su hijo Juan Francisco Sicilia, pero también de alcaldes, policías y soldados muertos a manos del crimen.
Calderón sostuvo que "hubiera sido muy cómodo para mí no actuar pero como presidente vi la amenaza y me decidí a actuar".
El Estado sí tiene responsabilidades por la complicidad y la corrupción de algunos niveles de gobierno.
"Asumo la crítica, así sea injusta" por actuar que por no actuar.
"Yo me uno al clamor", le dijo a Sicilia, pero luego de citar a Bertholt Brecht, Calderón dijo que hubo muchos que vieron las cosas y no actuaron, por eso "cuando estuvo en mis manos actué, con aciertos y errores, pero actué".
Créame, señor Calderón, parafraseando a Brecht, cuando usted desaparezca, nadie moverá un dedo para su descanso.
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