viernes, 20 de agosto de 2010

ASUNTOS EXTRANJEROS: ¿ADIÓS, IRAK?

POR.- RAÚL GÓMEZ MIGUEL

El jueves 19 de agosto de 2010, siete años y cinco meses después que George W: Bush, entonces presidente de los Estados Unidos, consiguiera el aval institucional para "desarmar a Irak, liberar a su pueblo y defender al mundo de un grave peligro", el último convoy de la Cuarta Brigada Stryker de la Segunda División de Infantería comenzó su cruce hacia Kuwait en la madrugada sin ningún incidente, pese al temor de que hubiese minas sembradas en las carreteras.

Los 56 mil soldados aún estacionados en Irak, seis mil saldrán para el próximo 1 de septiembre, cuando dé inicio la llamada operación "Nuevo Amanecer", en la que 50 mil soldados estadounidenses participarán en tareas de estabilidad, asesoramiento, capacitación y apoyo a las fuerzas de seguridad iraquíes, dispuestos a entrar en combate de no funcionar la raquítica estabilidad interna.

A pesar del movimiento de tropas, la Casa Blanca está convencida que los soldados tienen que supervisar las operaciones de seguridad en tanto el nuevo gobierno iraquí logra reducir la violencia y asegurar el paso a una abollada democracia, que para la población es una prueba inobjetable del costo imperialista que les hicieran pagar el depuesto, detenido, juzgado y ejecutado dictador Sadam Hussein.

Estados Unidos continuará apoyando las operaciones antiterroristas, a los equipos de reconstrucción en el desarrollo de la capacidad civil y de las instituciones, y a las fuerzas de seguridad iraquíes hasta que la misión concluya en diciembre de 2011.

La inutilidad práctica de la ocupación militar estadounidense de Irak fue uno de los factores decisivos que hundieron la hegemonía del partido republicano y que permitió el ascenso de Barak Obama, de extracción demócrata y primer hombre de color a la Presidencia de la Nación, al comprometerse al desmantelamiento rápido de la herencia bélica de George W. Bush.

En los últimos 18 meses, según Obama, más de 90 mil soldados estadounidenses han salido de Irak, saldando la cuenta que tenía con sus electores desde 2008.

La cobertura mediática en los Estados Unidos resalta el retorno de los veteranos que estuvieron obligados a repetir rotaciones en ese destino precisamente por la carencia de efectivos dispuestos a jugarse el pellejo en un conflicto que estuvo sostenido en mentiras.

El timo de la existencia de armas de destrucción masiva y los excesos documentados de violaciones permanentes a los derechos humanos de los iraquíes, le ganaron a los Estados Unidos otra estrella de rechazo y oprobio mundial.

La ocupación de Irak ha costado la vida de cuatro mil cuatrocientos miembros del ejército norteamericano y un número aún no revelado de heridos.

Aunque se reconoce el heroísmo, la valentía y la dignidad de los soldados, es imposible no cuestionar los verdaderos móviles de la ocupación y los resultados tangibles de los millones de dólares invertidos en la protección de la infraestructura petrolera más importante de la región a costa de los “daños colaterales” inherentes a una operación de este tipo.
A pesar que me gustaría creerlo, la reconstrucción de Irak no será de terciopelo, estará marcada por fuertes movimientos rebeldes y la palpitante probabilidad de la guerra civil.

En el afán de salvar el rostro ¿humano? del imperio, los Estados Unidos cerraron la puerta a un diálogo libre y soberano entre las bandas políticas locales, y obligaron a generar un esquema democrático ajeno a los usos y costumbres de Irak.

Que a nadie asombre una repetición de lo que vive Afganistán este momento.

Un gobierno emanado de la imposición extranjera es un excelente pretexto para zarandear el avispero y matarse entre sí.

A Irak aun le falta un largo trecho de infamia antes de pensar en la paz.

Los Estados Unidos salen con la cola entre las piernas, pues, nada de lo que aseguró fue conseguido y la seudo victoria, pírrica indudablemente, no alcanza para compensar el dolor, la destrucción, las bajas de hombres y mujeres sacrificados a los Señores de la Guerra.

1 comentario:

Emir el CUYO dijo...

Esto es prueba de que ni con el mejor armamento o tecnologia bélica Estados Unidos ha logrado prevalecer en las guerrillas, si bien es cierto que los "gabachos" la arman en las guerras convencionales los iraquis son expertos en pelear con tan solo un puño de arroz o semillas en su estomago; esta será una épica derrota como la sufrida en Vietnam y algunos paises del ex bloque sovietico en plena guerra fría.

A los soldados norteamericanos no se les puede justificar las arbtrariedades que hacen pasar los presos afganos y de Irak tras violentar fuertemente sus Derechos humanos y que se han olvidado de estos presos tras una campaña fuertemente desinformada para darle seguimiento a los Juicios de soldados que con muy poca madre torturaron a ex soldados para sacarles informacion, creo que la memoria de los mexicanos no es la única de muy corto plazo, sin olvidar que aun ny cuando se les entrena para pelear bajo presion y estres tambien no se les elimina del todo la parte humana y se les enseña las "reglas" de guerra que se acordarón en Ginebra.

¿qué mas hay que pensar si es que este tipo de soldados son sacados de las clases mas bajas de la sociedad "gringa"?¿cuál reconstrucción de Irak? en realidad este país nunca fue construido siempre fue manejado por manos largas y paises con intereses pretoleros y una vez mas la clase media y baja son quienes pagan los platos rotos, sin olvidar que no todos los soldados estadounidenses fueron a pelear por ordenes, si no que fueron a cantarles a los iraquies "burn mother fuckers...burn"