MARASSA: Absurdos públicos

POR: Raúl Gómez Miguel

A poco de cumplirse una década de dominio político nacional por parte de la una vez llamada oposición, la percepción de los ciudadanos es clara: izquierda o derecha, los hombres públicos acaban pareciéndose entre sí. De tanto perseguir la aniquilación definitiva del Partido Revolucionario Institucional, tanto el PAN como el PRD terminaron copiando el viejo estilo y las marrullerías de los tricolores permitiendo, más por los errores propios, que la genialidad burocrática, que el PRI amenace con ser la organización salvadora de la patria frente a los delirios del conservadurismo ramplón o el mesianismo universitario de los liberales. Por esto nos hemos permitido anotar algunas recomendaciones para que sea quien gane el destino de este cuerno de abundancia, que es México, no quede mal frente a los admiradores y continúe la bella tradición de ineficacia profesional que tanto ha hecho por el subdesarrollo de la nación.

1.- Tome decisiones políticas, nunca administrativas. El asunto es presumir no demostrar la ineficiencia.

2.- El interés personal siempre estará por encima del ciudadano; total no es de su familia.

3.- Cumpla su trabajo que es no hacer nada, nadie le paga para lo contrario a menos que no sea político.

4.- Resuelva con obviedad las situaciones obvias; salve a la gente después de una emergencia, no prevenga a lo mejor nunca sucede la desgracia.

5.- Demuestre una absoluta ausencia de inteligencia; saber que se cuenta con personal apropiada malacostumbra a los votantes.

6.- Enamórese o tenga hijos con personalidades de la farándula; un buen escándalo augura fama y hasta aplausos de los aficionados a este tipo de escenitas.

7.- Calque y aprueba leyes de primer mundo sin preocuparse por las implicaciones locales; Nueva York es como el Distrito sólo que más publicitado.

8.- Culpe a los que menos tienen de todas las imbecilidades que se le ocurran; son mayoría y, por ende, nunca podrán acercársele precisamente por que son miserables.

9.- Que la realidad no lo desdiga, invéntese una a modo y póngale mucha propaganda.

10.- Envuélvase en la bandera cuando no tenga otro recurso que descomponer; la Patria aguanta todo, hasta a usted.

11.- Declárese un luchador social y no se confunda, no se trata de hacerle al enmascarado, prometa, que no cuesta.

12.- los recintos oficiales son escenarios, úselos y monte el perfomance que mejor le vaya; hay que darle utilidad a las instalaciones.

13.- Tenga trajes de todos los colores; no se sabe por dónde vienen los trancazos y es preferible dar el chaquetazo que salir del presupuesto.

14.- No contrate periodista o comunicólogos que únicamente a sí mismos se toman en cuenta, levante geniecitos en computación para lo coloquen en el ciberespacio, no por actualidad, si no por moda.

15.- Haga escándalos, son baratos y reciben la atención mediática.

16.- Sea minimalista en las declaraciones, a pocos le importan.

17.- Decrete planes que hagan planes de planes para planes por planes en planes hacia planes desde planes ante planes cuando planes mientras planes.

18.- Apueste a una sola genialidad: saber anticipadamente quién es el bueno en la administración que sigue.

19.- Aprenda otros idiomas para engatusar a los extranjeros, que en eso de la lengua tambien se comen buenos tacos.

20.- Y aclare, por favor, que no es político, que sólo hace grilla.