Para ser una especie en extinción resulté bastante querido, aceptado y apoyado por una diversidad de entidades -humanas y no- que hicieron suyo el Manifiesto Dodo y que comprendieron el mensaje: el límite sólo existe en nuestra mente.
Mención especial merece Maura Hill que tuvo a bien producir uno de los mejores retratos existentes sobre mi persona y que engalana esta página.
Agradezco a Mirna Martínez quien se comprometió a darme movimiento para dinamizar las secciones y lo que vaya haciendo falta. En caso de incumplimiento, caerá sobre ella la maldición Dodo.
Daniel Hosoya contribuyó a resolver los problemas técnicos de mi presencia en el ciberespacio.
Valeria Martínez –la de la bonita sonrisa- tuvo la genialidad de aportar otra personalidad a mi multifacética presencia, misma que verán más adelante y que se titula El Dodo de la Mancha.
A todos los Dodos Honorarios que han contribuido con material propio y ajeno al nacimiento de este proyecto les doy las gracias con todas mis plumas.
Devolviendo la atención aplaudo y beso muchas veces al Abuelo que fue el instigador para meterme en estos trances tecnológicos y abrirme a este mundo extraño pero fascinante y que, desde su blog (abueloinheartny.blogspot.com), me ha echado muchas porras para que sus lectores también me visiten.
A Youtube que facilitó los videos correspondientes a las participaciones cinematográficas de algunos de mis parientes que, aunque no les hacen mucha justicia, sí son fieles a nuestro espíritu juguetón y emprendedor. Saludos y un baile para Porky.
Vaya un Baile Dodo para todos aquellos que han tenido la gentileza de comentar los trabajos aquí expuestos. No sean tímidos, sigan haciéndolo y pasen la voz.
Y aunque ya lo saben se los repito: El último de los Dodos es un proyecto que vive de los demás para los demás.
Mención especial merece Maura Hill que tuvo a bien producir uno de los mejores retratos existentes sobre mi persona y que engalana esta página.
Agradezco a Mirna Martínez quien se comprometió a darme movimiento para dinamizar las secciones y lo que vaya haciendo falta. En caso de incumplimiento, caerá sobre ella la maldición Dodo.
Daniel Hosoya contribuyó a resolver los problemas técnicos de mi presencia en el ciberespacio.
Valeria Martínez –la de la bonita sonrisa- tuvo la genialidad de aportar otra personalidad a mi multifacética presencia, misma que verán más adelante y que se titula El Dodo de la Mancha.
A todos los Dodos Honorarios que han contribuido con material propio y ajeno al nacimiento de este proyecto les doy las gracias con todas mis plumas.
Devolviendo la atención aplaudo y beso muchas veces al Abuelo que fue el instigador para meterme en estos trances tecnológicos y abrirme a este mundo extraño pero fascinante y que, desde su blog (abueloinheartny.blogspot.com), me ha echado muchas porras para que sus lectores también me visiten.
A Youtube que facilitó los videos correspondientes a las participaciones cinematográficas de algunos de mis parientes que, aunque no les hacen mucha justicia, sí son fieles a nuestro espíritu juguetón y emprendedor. Saludos y un baile para Porky.
Vaya un Baile Dodo para todos aquellos que han tenido la gentileza de comentar los trabajos aquí expuestos. No sean tímidos, sigan haciéndolo y pasen la voz.
Y aunque ya lo saben se los repito: El último de los Dodos es un proyecto que vive de los demás para los demás.
Let’s do The Dodo.
El ultimo de los Dodos
1 comentario:
Gracias por el reconocimiento, y me da mucho gusto de que existe este blog porque puede ser de gran utilidad por los temas que tocan y por su experiencia critica.
Mucha Suerte
Publicar un comentario